Cuando mencionamos la memoria olfativa, nos referimos al tipo de memoria capaz de estimular nuestro cerebro a través del sentido del olfato. A través de los olores, podemos evocar recuerdos guardados en el subconsciente, e incluso lugares o situaciones vividas en el pasado de manera instintiva.
La memoria olfativa es capaz de suscitar emociones en las personas, al rememorar determinados momentos, provocando en ellas cambios por los estímulos que suponen. El olfato, es uno de los cinco sentidos más poderosos para llegar al cerebro de una manera directa. Las sensaciones que puede crear el olfato son capaces de llegar directamente al cerebro. Es por ello que este sentido tiene un gran poder si lo analizamos bien.
¿Cuál es el funcionamiento de la memoria olfativa?
Es importante indicar, que las vivencias de cada persona son únicas. El mismo olor, en personas diferentes, puede provocar diferentes sensaciones. Existen fragancias que pueden servir para la mayoría de casos, pero cada individuo percibirá determinadas sensaciones en mayor o menor medida. Una fragancia que evoque el agua del mar y la arena de la playa, suelen provocar paz y tranquilidad y el ocio, a la vez que fomentar el consumo de bebidas. Sin embargo, puede existir un reducido grupo de personas a las que este olor les traslade a tener emociones diferentes.
A través de la memoria olfativa, podemos llegar a excitar el sistema límbico, por el cual se gestiona la memoria y las emociones. Pero, ¿Cómo es capaz de estimular el olfato el sistema límbico? El bulbo olfatorio, envía la información que recibe directamente a la corteza del cerebro que se encuentra relacionada con el sistema límbico. Es por este motivo, por el que el olfato es capaz de estimular directamente el cerebro. Esta información que a priori es utilizada por el cuerpo humano para su desenvolvimiento diario, puede llegar a conducirnos a encontrar estados de paz, armonía, además de para prepararnos para determinadas situaciones.
La información recibida en el cerebro a través del olfato, es algo que heredamos de nuestros antepasados más ancestrales.
El proceso cognitivo y la memoria olfativa
Como hemos indicado, el cerebro recibe la información a través del bulbo olfatorio estimulando el sistema límbico. El proceso cognitivo que se desarrolla a través del olfato, es decir, la decodificación de información por parte del cerebro de un olor, se basan en el siguiente proceso:
- La percepción del mismo
- La sensación que nos provoca al percibirlo
- Lo que nos conduce a las emociones que nos crean dichas sensaciones
- Hasta llegar a la asociación de dichas emociones con momentos pasados a través de nuestros recuerdos
La memoria olfativa y el marketing olfativo
El marketing olfativo, se basa en este principio que ya se encuentra demostrado, para potenciar las sensaciones y emociones de las personas con un fin específico. Entre muchos ejemplos, la memoria olfativa puede llegar a la relajación de los trabajadores, fomentando un ambiente de trabajo más placentero. Otro caso enfocado a los comercios, es el de potenciar las ventas de un local motivado las sensaciones de los clientes. Para ello, es imprescindible elegir la fragancia correcta que vestirá nuestro negocio, dependiendo ésta, de la oferta del sitio y del público potencial que exista.