Pacientes relajados en tu clínica y centro sanitario

Siempre que nos vemos en la necesidad de entrar en una clínica dental, estética o relacionada con cualquier tema de la salud, nos entra cierto estrés y pánico por lo que pueda pasar allí dentro. La incertidumbre, el miedo a los problemas de la salud, las diferentes complicaciones que pueden surgir… Son demasiados los pensamientos que rondan nuestra cabeza cuando tenemos que revisar nuestra salud. Si a esto le añadimos un tiempo de espera, la cosa se pone más tensa aún. Pero si además le sumamos los distintos olores provenientes de los medicamentos o tratamientos que se utilizan para tratar diversos temas de salud, la experiencia se convierte en una que está lejos de ser agradable. La aromatización de estos espacios podría ser la solución para unas visitas más agradables.

Crear espacios seguros a través del aroma

La aromatización en centros sanitarios, sobre todo en clínicas dentales, puede manipular nuestra forma de percibir estos momentos relacionados con la salud que tanto nos pueden estresar y en muchas otras ocasiones en las que nuestra salud puede verse repercutida negativamente. En cualquier clínica o negocio de esta índole es importante crear un ambiente de seguridad a los pacientes, ambientar un entorno cálido y cómodo, en el que se sientan como en casa y puedan relajarse. Hay situaciones que obviamente no podemos controlar y que pueden llegar a ser graves y preocupantes, pero sin lugar a dudas, podemos aminorar estas emociones negativas.

Lo primero que debemos conseguir es que el paciente acuda a su intervención con el médico de manera más relajada y con una actitud positiva. Para ello lo primero que debemos hacer es reducir el olor de esos productos que pueden generar cierta inquietud. Esto son los productos que se emplean en tratamientos dentales (algunas substancias químicas como el Eugenol, el Cresophene, formocresol y muchos otros). Los productos limpieza también pueden transmitir esta sensación, al igual que el olor que generan los lavabos en ocasiones.

Evitar olores no agradables

Otros olores desagradables que puede haber en las clínicas de salud son los malos olores que generan los seres humanos o los materiales y aparatos. Es cierto que hay algunos olores que no podemos evitar en nuestra clínica, pero si podremos camuflarlos y convertirlos en algo imperceptible. El marketing olfativo es la solución para convertir una clínica de salud en un lugar en el que podríamos sentirnos relajados y calmados.

Un aroma que, sin duda podría causar una sensación de relajación a los pacientes son las fragancias con pequeños matices florales que, si mezclamos con aromas más estimulantes y fuertes, como los cítricos, podríamos crear un ambiente muy cómodo y alegre. Las plantas aromáticas funcionan muy bien para suscitar un ambiente tranquilo y sosegado y con estas nos referimos a la lavanda, la sabia, el basílico o la vainilla. Estos olores además de transmitir comodidad, también pueden transmitir una sensación campestre, rural y, por lo tanto, muy amistoso y de confort. Si lo que queremos es decantarnos directamente por un olor más floral podemos escoger el olor a rosas o el jazmín, que son fragancias muy suaves.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.